Este lunes, la mesa establecida por el presidente de la República, José Raúl Mulino, recibió con urgencia dos propuestas vitales para salvar el programa de pensiones de la Caja de Seguro Social (CSS). La Asociación Nacional de Enfermeras de Panamá (ANEP) y la Federación Nacional de Asociaciones de Pacientes con Enfermedades Críticas, Crónicas y Degenerativas presentaron sus iniciativas.
Propuestas de la ANEP
Ana Reyes, representante de la ANEP, exigió el retorno al sistema solidario y rechazó las medidas paramétricas. Su propuesta incluye que el Estado panameño aporte el 2% del Producto Interno Bruto (PIB) al programa de Invalidez, Vejez y Muerte. Además, sugirió alternativas para obtener estos fondos, tales como:
- Reducir la evasión de tarifas.
- Incorporar a los trabajadores informales.
- Establecer un nuevo impuesto a las sedes de multinacionales en Panamá.
Demandas de Pacientes con Enfermedades Crónicas
Por su parte, los pacientes con enfermedades crónicas pidieron que la reforma a la Ley 51 de seguridad social incluya su representación en el consejo directivo de la CSS. Exigen cambios que faciliten la compra de medicamentos e insumos médico-quirúrgicos y se mantienen neutrales entre el plan solidario y el pilar de ahorro individual hasta que se evalúen todas las propuestas.
Hasta la fecha, han apoyado un total de siete propuestas. Este miércoles, se espera la intervención del Consejo Nacional del Sindicato Independiente (Conusi) y la Asociación de Médicos, Odontólogos y Afines de la CSS (AMOACSS).
Preparativos para reformas a la seguridad social
Todas las propuestas servirán para garantizar que el Gobierno Nacional prepare un paquete de reformas a la seguridad social que se presentará a la Asamblea Nacional a finales de octubre. Los informes y propuestas financieras de la CSS están disponibles al público en el sitio web oficial de la institución.
Mesa de salud y expediente electrónico
En otra sesión, la Mesa de Salud discutió el retraso quirúrgico y las consultas ambulatorias. El Ministro de Salud, Fernando Boyd Galindo, lideró la reunión con la participación de sindicatos de educadores, trabajadores, médicos y pacientes.
Se presentó el estado del “Subproyecto Sistema de Información en Salud 2.0”, que busca implementar una nueva historia clínica electrónica. Este sistema, que comenzó en 2014 con un costo de 28 millones de dólares, quedó estancado por falta de pago a proveedores y soporte técnico.
Los sindicatos coincidieron en la urgencia de establecer un sistema único de historia clínica electrónica que interconecte al MINSA y a la CSS, mejorando así la atención médica. Este sistema promete optimizar la logística de medicamentos, reducir el retraso quirúrgico y mejorar la gestión de citas.
La Junta de Salud propuso aprender de experiencias exitosas en otros países, como Brasil, donde el sector privado se ha integrado a la salud pública, aunque enfatizaron que la tecnología no debe deshumanizar la atención sanitaria.
La próxima reunión, programada para el miércoles 9 de octubre, abordará otros temas pendientes, especialmente relacionados con recursos humanos, mientras la salud de Panamá sigue bajo el escrutinio de los sindicatos, que continúan en su lucha por soluciones efectivas.